PROYECTO DE LEY EN LOW DEFINITION

Alejandro García Acuña

Profesor de Artes Visuales_UMCE
(Columna publicada originalmente en revel.cl)


Quienes queremos una buena industria televisiva vimos muy esperanzados la presentación del proyecto de ley que entró al Parlamento en la administración anterior. Un proyecto que, sin duda, se pensó iría robusteciéndose a medida que se iba formulando la discusión en las diferentes comisiones del poder legislativo, en una complicidad con sectores académicos, audiovisuales, culturales y de los medios en general. Todo, con el fin de afianzar y asegurar que esta ley fuera sólida y que estableciera la televisión que queremos por los próximos veinticinco años. Televisión de libre recepción, de calidad, formativa, cultural, entretenida y que se hiciera cargo de la influencia que tiene sobre las audiencias de manera responsable. Pero nada de esto ha ocurrido.

El tema de la TV digital salió a discusión desde la masa ciudadana previamente al Mundial de Fútbol y se dio en casi todas las tiendas de venta de televisores. Cuál sería el más apto para la norma que Chile optaría, era la interrogante. Los vendedores hablaron de tantas cosas neobarrocas que nadie entendía. La idea era ver la tele en plasma, led o lcd. Y esa sería la discusión ciudadana en torno a la TV digital. Finalmente nos quedamos con la norma brasileña- nipona (que tiene mucho por rodar), siendo áquel todo el tema. Ahí quedó.

Sin embargo, estos últimos dos meses -es más, estas semanas- han sido cruciales para esta importante ley. Tan importante como las políticas energéticas, el posnatal y tanta agenda legislativa. El 6 de abril la ley de Tv Digital se aprobó por la Cámara de Diputados, luego de su paso por las comisiones de Hacienda, Ciencia y Tecnología y Cultura. Los aportes de profesionales del área no fueron considerados, imposibilitando un debate responsable y con proyecciones integrales.

Lo complicado es que ahora el proyecto se está discutiendo y resolviendo en el Senado, donde tanto Alianza como oposición han considerado que se trata de una discusión primordialmente técnica, revisándose sólo en la Comisión de Transporte y Telecomunicaciones. Si a esto le sumamos las ganas del Gobierno de promulgar lo antes posible -el Presidente le puso suma urgencia- el panorama no es en “alta definición”.

Con esperanzas visualizamos en la región la posibilidad de contar con una plataforma de televisión abierta, diversa, inclusiva, cultural, educativa, entretenida y gratuita, que fomentara señales regionales, que alentara una verdadera televisión local y que permitiera la concreción de canales comunitarios en la zona. En definitiva, desarrollo de contenido local, donde productoras y creadores locales recrearan imagen identitaria cercana a la realidad cotidiana, sin tener que ver permanentemente cómo está el tránsito en Vespucio con Kennedy.

Si bien es cierto que hasta el momento se ha logrado el reconocimiento y la reserva de un 40% de las concesiones para señales de radiodifusión televisiva de libre recepción regionales, locales, comunitarios, este aplauso no lo daremos hasta que los canales grandes terminen su etapa de transmisión simultanea análoga-digital, en por lo menos 5 años más. La televisión regional, local y comunitaria, necesita un impulso concreto dentro del escenario digital sin condiciones, de libre recepción, sin operador de cable de por medio.

Es urgente y necesaria una discusión y un debate amplio, donde la voz ciudadana se escuche en torno a la televisión que queremos heredar a nuestros hijos, donde el concepto cultura en la industria por fin se defina y precise, y donde la calidad de ésta se sustente no sólo en la bolsa. La idea es cambiar el modelo de televisión, por uno que represente la diversidad cultural de nuestro país y es ahí donde las regiones y nuestras comunidades tendrán una responsabilidad y un rol en la imagen país.

Para que este proyecto no tenga el carácter de suma urgencia impuesto por el Ejecutivo, y así darle contenido y solidez a la discusión y al mismo proyecto, es necesario informarse. Revise la Mesa de Ciudadanía y TV Digital http://www.ciudadaniatv.cl/: ahí encontrará las once propuestas que organizaciones ciudadanas de las comunicaciones, culturales y ONG’s han presentado, pero que no han sido incorporadas. Prestigios@s y reconocid@s profesionales han aportado a la información y al debate, con altura de miras y sin mezquindades, ampliando la discusión más allá de las conformaciones de los directorios, tanto del CNTV como de TVN, incorporando conceptos que aportan a lo que la mayoría de los chilenos y antofagastinos queremos: una Televisión Digital en Alta, muy Alta Definición.

Por una TV Digital de Calidad para tod@s.